8 consejos para dejar (por fin) de procrastinar

06 avr. 2020

4min

8 consejos para dejar (por fin) de procrastinar
auteur.e
Camille Montaz

Freelance Communication & Rédaction

“Mañana, ya lo haré mañana”. Tienes la determinación y la motivación. Estás listo para conquistar el mundo, alcanzar tus objetivos profesionales y tachar todas las tareas pendientes de tu lista de cosas por hacer. Pero, al final… no haces nada. Dejas para mañana ese correo urgente que debes responder y la actualización de tu currículum sigue en espera. Conclusión: eres un procrastinador.

Que no cunda el pánico, ¡no estás solo! Según Diane Ballonad Rolland, autora del libro J’arrête de procrastiner (“Dejo de procrastinar”), la procrastinación ha aumentado entre un 300 y un 400 por ciento en los últimos 40 años. Tendemos a aplazar todo lo que tenemos por hacer. Nos convencemos de que trabajamos mejor bajo presión y en el último minuto o de que todavía tenemos tiempo y lo podemos hacer otro día. Por un lado, esto tiene una ventaja: somos unos optimistas empedernidos. Por otro, es un mal hábito. Pero al menos tiene cura. Aquí tienes ocho consejos fáciles que te ayudarán a dejar de procrastinar.

1. Aplica el método de la mejora continua

¿Tienes un proyecto que te parece imposible y que llevas semanas aplazando? Si te concentras únicamente en el objetivo final, es fácil que te desanimes. Pero Roma no se construyó en un día. Si fragmentas cada proyecto en tareas más pequeñas, podrás avanzar poco a poco hasta finalizarlo. Para nuestro cerebro, es más fácil ejecutar tareas claras y concretas, y hacerlo de una manera ordenada y precisa.

2. Lánzate de cabeza

Deja de decirte a ti mismo que no tiene sentido completar “solamente” una pequeña tarea. Empezar es la parte más difícil. Una vez hayas dado ese paso, tendrás el impulso necesario para hacer el resto. No permitas que tu cerebro sabotee tu motivación con pensamientos negativos que retrasen una actividad. Empieza con tareas pequeñas para arrancar el proceso: por ejemplo, puedes escribir el asunto de un correo electrónico o verificar si hay una sala disponible para la reunión del día siguiente. Y sobre todo, elimina completamente de tu vocabulario la frase: “No tengo tiempo”. ¡Haz tiempo! A menudo, las tareas que más nos estresan no son largas, y perdemos más tiempo pensando en cómo evitarlas que realizándolas.

3. Elige un buen momento

Puede que encuentres el tiempo, pero también debes asegurarte de que se trata del momento más oportuno. Aborda las tareas más difíciles, aquellas que tiendes a aplazar, en los momentos en que seas más eficiente y estés más concentrado. Para lograrlo,es necesario que te conozcas a ti mismo. ¿Eres más productivo por la mañana? De ser así, dedícate a cumplir las tareas más complejas al principio del día. De lo contrario, estas se acumularán en tu mente y esto te impedirá completar otras más sencillas. Así pues, sácatelas de encima lo antes posible.

4. Sigue la regla de los dos minutos

¿Ves que no avanzas? En este caso, proponte completar todas esas tareas que te llevarán menos de dos minutos. Esta es la recomendación que hace David Allen, autor estadounidense y asesor de productividad, en su libro Organízate con eficacia. Seguir este consejo te proporcionará una sensación de satisfacción y te animará a realizar todas las tareas pendientes sin demora.

5. Utiliza la técnica Pomodoro

Trabaja en períodos de 20 a 25 minutos seguidos de pausas breves para liberar tu mente y estimular la actividad intelectual. La técnica Pomodoro se basa en esta premisa y recomienda utilizar un cronómetro para establecer ciclos de trabajo que promuevan la agilidad intelectual. De esta manera, serás más eficiente y procrastinarás menos. Si utilizas el softwareTrello para organizar tus proyectos, puedes sincronizarlo con herramientas como Pomello y convertir tus “tarjetas” en “tareas Pomodoro”. Esta técnica te ayudará a crear tu lista de tareas pendientes y también a conseguir finalizar las tareas que tengas anotadas para cada día.

6. Haz una lista realista

No tiene nada de malo querer hacer muchas cosas, pero debes ser realista. Si elaboras una lista de tareas por hacer demasiado larga, tan solo lograrás desanimarte y probablemente terminarás por procrastinar. Por lo tanto, intenta calcular el tiempo que dedicas a cada tarea para así saber qué puedes lograr. Después, al final del día, compara el tiempo que creías que ibas a dedicar a una tarea con el que dedicaste en realidad. No te preocupes si sobreestimas cuánto tiempo te llevó cada actividad, ya que esto luego te dará mayor margen para organizarte. Y, por supuesto, recuerda ser paciente contigo mismo: los grandes logros profesionales de hoy en día se han hecho realidad tras años de esfuerzo.

7. Comprométete

Tendemos a posponer menos las tareas que nos hemos comprometido a realizar para otras personas, sobre todo si sabemos que nuestro trabajo les puede afectar. Por ello, es recomendable, siempre que puedas, crear situaciones que te obliguen a asumir la responsabilidad. Por ejemplo, comunica a tu equipo que estás trabajando en algo nuevo para la próxima semana o habla con tus amigos sobre una meta personal que desees alcanzar. Estos compromisos contigo mismo pueden ayudarte mucho.

8. Piensa en la recompensa

Alégrate tras cualquier progreso que hayas conseguido. De esta manera, tu cerebro asociará el cumplimiento de una tarea con la sensación de satisfacción, lo cual te motivará a seguir por el mismo camino. En la mayoría de los casos, no aplazamos las tareas porque estemos abrumados sino porque nuestras prioridades están equivocadas. Eso hace que nos dediquemos a otra actividad, una que nos parezca más fácil. Si abordas tu lista siguiendo los consejos que te hemos dado, sabiendo que tendrás una sensación de satisfacción cada vez que completes una tarea, ¡el proceso será mucho más agradable!

“Tu futuro se construye con lo que haces hoy, no mañana” - Robert T. Kiyosaki

Traducido por Andreína Gil

Foto de WTTJ

¡Sigue a Welcome to the Jungle en Facebook y abónate a nuestra newsletter para recibir nuestros mejores artículos!

Les thématiques abordées